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Los 'pop-ups' en la restauración son un terreno que a menudo parece reservado a los restaurantes de moda, y a los cocteleros estrella y chefs 'ultracool' que van de barra en barra luciendo tatuajes. Lo que no es demasiado habitual es que un chef de altos vuelos retirado salga de su jubilación para cocinar para la clientela otra vez.
Y esto es lo que pasará el próximo 23 de mayo a las 20 h: Josep Maria Freixa, que durante 32 años estuvo al frente del Racó d'en Freixa y es sin duda uno de los chefs más importantes de los últimos 50 años en Barcelona, vuelve al sitio donde estuvo su restaurante, ahora MAE, para cocinar un menú degustación con los actuales propietarios. Jubilado desde 2018, lo hará con 81 años.
El chef Germán Espinosa, que junto a su socio Diego Mondragón son propietarios y cocineros de MAE –sin duda uno de los mejores restaurantes que abrió el año pasado en Barcelona– explica que la colaboración surgió de forma muy natural: "Josep Maria es un buen amigo. Nos ha ayudado mucho, y hacía ya tiempo que teníamos pensado rendirle un homenaje. Como él es un cliente habitual y vecino –de hecho se pasa por aquí una vez a la semana– se nos ocurrió proponerle esta colaboración", dice Espinosa.
Será un menú a seis manos donde se mezclarán los platos de la cocina sincrética de MAE –corbina acebichada con maíz y ají amarillo, o espárrago blanco con coco albahaca son dos muestras– con clásicos del Racó d'en Freixa, como por ejemplo la lubina estilo Wellington o los guisantes del Maresme con tripa de bacalao y butifarra negra.
Este revival único y singular –que yo tenga noticia es la primera vez que un restaurante cerrado vuelve a la vida en el mismo inmueble que lo acogió, y con el mismo chef– cruzará ambos estilos de cocina en un menú degustación de diez pasos a 120 euros, bodega incluida. Se puede reservar en el teléfono 645 73 62 83. "A pesar de su edad, Josep Maria tiene una gran vitalidad y quizás esto abrirá paso a más colaboraciones", vaticina Espinosa. La huella de Freixa todavía está presente: la fórmula del pan que hornean en MAE cada día, con la máquina que fue de Freixa, es la que el veterano cocinero les transmitió.
El Racó d'en Freixa abrió en 1986 y durante años mantuvo una Michelin, merecida gracias a su cocina catalana de altos vuelos con fuerte influencia francesa. Tras la crisis de 2008, el restaurante se convirtió en Freixa Tradició, enfocado hacia la cocina catalana tradicional.
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